La medicina homeopática o alternativa tiene gran impacto en enfermedades agudas y crónicas, y es una terapia eficaz, natural y libre de efectos indeseables.
La medicina homeopática desde el punto de vista científico, es un abordaje biológico mediante nanofarmacologia natural de la salud de los seres vivos, y una alternativa real para el abordaje de enfermedades crónicas y agudas.
La homeopatía o medicina alternativa tiene gran importancia en enfermedades agudas y crónicas, resulta no sólo un procedimiento eficaz, natural y libre de efectos indeseables, sino un enfoque biorregulador que estimula al propio organismo para recuperar el equilibrio biológico, y derivado de ello su salud.
“En los últimos años, la convergencia de la nanotecnología y la homeopatía ha suscitado interesantes debates en las comunidades científicas y médicas. La nanotecnología, con su capacidad de manipular la materia a escala nanométrica, ofrece nuevas vías para mejorar la eficacia y la comprensión de los remedios homeopáticos.
“Esta intersección tiene el potencial de abordar el escepticismo de larga data que rodea a la homeopatía al proporcionar evidencia tangible de sus mecanismos de acción”, explica el estudio Nano-Enhanced Homoeopathy: Exploring the Intersection of Nanotechnology for Scientific Evidence in Homoeopathy a Narrative Review.
La nanotecnología ha marcado una nueva era para la homeopatía, ofreciendo el potencial de transformarla de una práctica tradicional a una ciencia basada en la evidencia.
De acuerdo con el estudio, “aprovechando el poder de los nanomateriales, la homeopatía está preparada para descubrir caminos previamente inexplorados, allanando el camino para un enfoque más sistemático y específico de la terapia”.
La investigación Homeopathy Seen as Personalised Nanomedicine señala que el concepto esencial de la homeopatía se basa en la fuerza de la experimentación con fármacos. En una prueba de medicamentos homeopáticos, unas pocas píldoras parecen capaces de iniciar una cadena de eventos que conducen a signos y síntomas detectables en seres humanos sanos.
En homeopatía, muchas veces una sola dosis de una potencia alta puede iniciar una acción terapéutica incluso cuando se establecen cambios patológicos. La base científica de la homeopatía parece estar dentro de los niveles más sutiles de la biología humana.
“Las prescripciones homeopáticas se basan en signos y síntomas característicos específicos de la mente y el cuerpo. Podría decirse, por lo tanto, que son las verdaderas expresiones del sistema genético.
“Las experiencias clínicas colectivas de los homeópatas de todo el mundo muestran que las curas de las enfermedades crónicas pueden ser duraderas. En el sistema biomolecular convencional, se prescribe una cantidad de medicamentos en función del peso corporal del consultante, mientras que las prescripciones homeopáticas contienen material a escala nanométrica que puede ser suficiente en cantidad para iniciar una acción terapéutica”, indica el estudio Homeopathy Seen as Personalised Nanomedicine.
El concepto y la utilización de la nanomedicina en el modo terapéutico convencional se centran en la administración de fármacos a tejidos celulares específicos utilizando nanopartículas que reducen el efecto citotóxico más amplio de un agente quimioterapéutico, especialmente en el cáncer.
El enfoque actual de investigación de la nanomedicina se basa en la creencia de que la medicina biomolecular convencional es el único enfoque terapéutico verdadero, es decir, “se utilizan nanopartículas de sustancias potenciadas preparadas y utilizadas homeopáticamente como agentes curativos”, indica el estudio.
Los métodos, la experiencia y las pruebas de investigación acumulados a lo largo de más de 200 años en homeopatía revelan que: en la práctica homeopática, independientemente de la enfermedad diagnosticada, a los consultantes se les administran medicamentos en función de sus signos y síntomas característicos individuales. Por lo tanto la medicación es altamente personalizada.
En tanto, “las nanopartículas se forman durante el proceso de potenciación de los fármacos homeopáticos. Lo anterior apunta al potencial de la homeopatía como una ‘nanomedicina personalizada’, lo cual tiene una importante posición en la próxima generación de la medicina terapéutica”, indica la investigación sobre nanomedicina.
De acuerdo con la Secretaría de Salud de México, frente al paradigma terapéutico occidental de eliminar o luchar contra la enfermedad, sus síntomas y sus agentes etiológicos, la homeopatía propone una terapéutica basada en el principio hipocrático en que lo semejante se cura con lo semejante, fortaleciendo al cuerpo para que se sane a sí mismo.
“Por otra parte, se acentúa el papel que juegan las emociones en las enfermedades, asignándoles un peso mucho mayor que el que se les da en el modelo occidental clásico. Con estos elementos se ha desarrollado todo un sistema complejo de atención a la salud. Hay fuertes evidencias que apuntan hacia explicaciones tanto desde el punto de vista biofísico con el concepto de la 'memoria del agua’, como de fenómenos bioquímicos implicados en la acción farmacológica de los medicamentos homeopáticos”.
La medicina homeopática ha tenido presencia en México desde el año de 1850, fecha que marca el inicio de su práctica en el país, con el reconocimiento del entonces presidente Benito Juárez, primero por médicos españoles y posteriormente por médicos mexicanos dentro del país.
A nivel preventivo, la homeopatía al abordar a los consultantes desde su propia individualidad, permite identificar personas cuyo estado físico-emocional puede predisponer a diferentes enfermedades. En estos casos de identificación de cuadros con propensión a distintos padecimientos, la homeopatía equilibra el metabolismo y se indica en conjunto con ejercicio y alimentación adecuada, refiere la Secretaría de Salud.
“A nivel terapéutico, la homeopatía o medicina alternativa se concentra en evitar el daño en el órgano blanco, fortalecer al cuerpo para que se cure a sí mismo, controlar la enfermedad y evitar sus complicaciones”.
La medicina homeopática se conecta por la idea histórica de respuestas bifásicas a la dosis (ley de Arndt–Schulz) y por el concepto moderno de hormesis: dosis bajas pueden estimular o re-encauzar vías protectoras que a dosis altas se inhiben. La MBrS adopta esa lógica cuando utiliza micro/bajas dosis con cantidad molecular medible —por ejemplo, en enfoques como la micro-inmunoterapia—, pero la expande y hace más precisa al apoyarse en evidencia mecanística, biomarcadores y monitoreo objetivo.
La MBrS incorpora la intuición de la dosis-respuesta bifásica que inspiró a la homeopatía, pero la operacionaliza con biotecnología, modelos de red y medición rigurosa (multi-omics, single-cell, biomarcadores), priorizando intervenciones de baja dosis con plausibilidad mecanística, monitoreo objetivo y co-gestión con terapias convencionales cuando están indicadas.
A medida que la nanotecnología siga evolucionando, también lo harán las oportunidades de mejorar la comprensión y la eficacia de los enfoques terapéuticos de la medicina homeopática o medicina alternativa, lo que en última instancia beneficiará a los consultantes y hará avanzar la atención médica en su conjunto.